MNGR – Nicaragua

Bicentenario de Managua – Raíces

Huellas_de_acahualincaLa ciudad de Managua actualmente es la capital de la República de Nicaragua, y en ocasión del bicentenario de ésta será necesaria una reflexión que permita una aproximación a sus raíces e historia, a la vida de quienes establecieron las bases esenciales de la identidad. De acuerdo a la división política – administrativa del país, es la cabecera del municipio y departamento homónimos. Sede del gobierno central y de los Poderes del Estado: Asamblea Nacional (Legislativo), Presidencia de la República (Ejecutivo), Corte Suprema de Justicia (Judicial), y Consejo Supremo Electoral /Electoral). La génesis citadina está asociada a un poblado indígena precolombino que se asentó en la orilla sur del Lago Xolotlán, o de Managua, hace aproximadamente unos 15,000 años. La historia de la ciudad registra que durante el año 1819 el poblado fue elevado a la categoría de villa.

Durante muchos años se ha repetido que Managua es una ciudad “dormitorio” de lunes a viernes. Que quienes habitan son personas de otras áreas geográficas. Que ésta no tiene raíces, y que consecuentemente carece de identidad propia. Por supuesto que esas opiniones no tienen fundamento. Están alejadas de lo que registra la historia. El examen riguroso de la historia y el ejercicio para la articulación del legado y las evidencias que dejaron nuestros antepasados permite aproximarnos a la realidad que existe independiente de esas opiniones. La reflexión y estudio seguramente permitirá desentrañar la esencia de la identidad originaria de Managua.

Huellas_de_acahualinca_1Las raíces que tributan a la identidad de la ciudad de Managua son profundas y robustas. Examinemos, por ejemplo, la información que brinda el Museo Arqueológico  Huellas de Acahualinca (entre los años  232 y el 8 a. C.). Ofrece una evidencia con relación a los y las primeros/as pobladores/as. Se afirma sobre la base del análisis científico mediante datación por radiocarbono a 6,000 años de antigüedad que estas huellas fueron hechas por los y las pobladores/as en un depósito de ceniza y “fango” volcánico. También hay evidencia del paso de algunos animales. La solidificación de éstas data de aproximadamente unos 2,120 años, con un margen de error próximo a los 145 años. Esta es una de las evidencias más antigua de la existencia humana prehistórica en el territorio nacional y de manera particular donde se asienta la ciudad de Managua.

Otro ejemplo de las raíces. Cabe destacar que durante el proceso de construcción del Estadio nacional de béisbol Denis Martínez, y donde se erige éste fue encontrado un cementerio prehistórico de unos 1,000 años, conforme información no oficial. En este mismo orden, algún momento me comentó un Maestro de Obra que participó en la construcción del Reparto San Juan (cercano a la Universidad Centroamericana) que durante las excavaciones de esta obra se encontraron vasijas y diferentes piezas de barro. Existen otras evidencias que constituyen una pieza importante y esencial de la historia de la ciudad.

Serpiente_emplumadaSeguramente en algún momento de nuestra vida logramos escuchar acerca de la Leyenda de la Serpiente Emplumada. Pero, sin lugar a duda alguna es algo más que eso. Se refiere a un relato relacionado a la divinidad de los pueblos indígenas que poblaron un área importante del territorio que actualmente es Managua. La Serpiente Emplumada es una pictografía: Quetzalcoatl, héroe cultural y divinidad suprema de Mesoamérica.  La pintura milenaria está grabada en un acantilado de la Laguna de Asososca. La leyenda se compartió oralmente, y poco a poco pasó a ser como un cuento. El grabado ha logrado la superación de los años, está en una de las paredes de la laguna.

Crecimos y adoptamos la costumbre de que esta Laguna estaba relacionada única y exclusivamente para el suministro de agua de consumo humano en la ciudad de Managua. Fue la fuente principal del recurso hídrico hasta diciembre de 1972, la fecha en que un terremoto destruyó la ciudad capital. En los alrededores –fuera del casco urbano-  se perforaban pozos artesanos para el abastecimiento de agua a la población. Pero, la historia con fundamente en esa pictografía registra la presencia milenaria de un pueblo con origen lejano al bicentenario.

No cabe duda alguna que la Laguna de Asososca es algo más que una fuente de agua para consumo humano. Fue el recinto sagrado y ceremonial de aquellos primeros pobladores/as que nos antecedieron en la vida. Con fundamento en los vestigios conocidos se puede afirmar que la población de Managua tiene raíces profundas en la llanura de la costa sur del Lago Xolotlán. Se debe tener presente que este pueblo pre – histórico seleccionó un área geográfica para establecerse con varias lagunas en semi – círculo: Acahualinca, Tiscapa, Asososca, y Nejapa. Un poco más lejanas: Xiloá y Apoyeque

Nota: Las imágenes que acompañan estas líneas circulan libremente a través de internet, pero alguien dedicó tiempo y paciencia para el legado. Nuestra gratitud.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *